El municipio busca regularizar la situación en más de 45 mil parcelas que no pagan servicios

Por una decisión del Intendente  Gustavo Martínez, el gobierno municipal promovió y logró la aprobación de la figura del contribuyente voluntario en la ciudad de Resistencia; a través de la cual se registrará a los propietarios de más de 45 mil parcelas habitadas que no tributan en la ciudad.

 “El objetivo es ensanchar la base tributaria municipal para que la carga no sea para los mismos a los que históricamente se les cobró”, indicó.

Según datos aportados por él, Resistencia cuenta 142 mil parcelas habitadas; de las cuales sólo 93 mil son contribuyentes de tasas de servicios. “Tenemos más de 45 mil parcelas habitadas que no pagan ni siquiera los 611 pesos bimestrales de la tasa de servicios básica”, insistió. Este grupo es de “planes habitacionales sociales, asentamientos, barrios históricos sin regularizar o sin mensura”.

En ese contexto es que la actual gestión definió avanzar en una registración que permita revertir esa realidad que pone al 35 por ciento de las viviendas de la ciudad en situación irregular. Un conjunto de casas y familias que, según el jefe comunal, “es el que más demanda porque tiene calles de tierra, porque hay que hacer el entubado, hay que resolver el alumbrado”; entre otros servicios y obras de infraestructura en los que no se termina de avanzar por no estar estos barrios incluidos en los planos de la comuna.

Grandes beneficios

A pesar que las sucesivas gestiones anteriores no quisieron avanzar con este tema por “el costo político”, a través de la Ordenanza de contribuyente voluntario los habitantes de estos sectores ya no deben esperar que la provincia mensure cada casa o aparezca una ley de expropiación. Por medio del programa Construyendo Barrios “ya los podamos registrar, cargar a la base catastral, imputar el tributo de tasas de servicios, no el inmobiliario porque todavía no tienen el título, pero que por lo menos empiecen a pagar tasas de servicios”, continuó explicando el jefe comunal.

Aunque actualmente esas zonas ya son alcanzadas por servicios municipales, la idea es que aquel barrio que sea registrado y pague la primera factura mensual de 611 pesos, elija democráticamente cuál será la primera intervención en espacios públicos que vaya a realizar el municipio.