La nueva terminal, más nueva que nunca

LA NUEVA NUEVA TERMINAL

“Como política pública nos propusimos poder modernizar funciones”, sentenció la arquitecta Fernández. Y para ellos se trazaron dos simples interrogantes: ¿Qué necesita el usuario? ¿Qué necesita el turista?

Bajo esas pautas se realizó el trabajo que consistió en el cerramiento completo, con refrigeración y ambientación tanto en verano como en invierno, para minimizar el impacto del viento, el calor y el frío. Además se trabajó en señalética y comunicación dentro de la terminal. Pero no sólo en las fijas, como pantallas o sonido, sino también en las conexiones a Internet, por ejemplo.

“Los espacios de espera son fundamentales. Por eso mismo se lo amplió, optimizando la Terminal con un sólo acceso que direcciona al área de dársenas, donde sólo pueden ingresar quienes tengan boleto. Así, vamos a tener una terminal que está a la altura de las terminales del resto de América Latina y otros países”, destacó.

“El funcionamiento va a ser muy similar al de los aeropuertos. Queremos poder esperar con acceso a todos los servicios, como comercios, locales de comidas, farmacias y más”, resaltó.

“No sólo pudimos modificar lo tangible con lo arquitectónico, sino también intangibles como el funcionamiento de remises, de las líneas de colectivos que ahora tienen sus paradas afuera”, subrayó.

“La obra nos ha llevado varios años de trabajo, pero hemos logrado modificar todo. Creemos que ahora se va a convertir en un punto de descentralización de toda la actividad de la ciudad hacia la zona sur”, concluyó.

EL TRABAJO DE FONDO

Fernández también repasó el trabajo de gestión política que debió realizarse para poder realizar estos cambios a pesar de la que Terminal estaba concesionada desde gestiones anteriores y la potestad sobre la misma es de una firma comercial. “Es una gestión que retoma el municipio al inicio de la gestión de Jorge Capitanich. Fue uno de los ejes que se trazó: poder recuperarla”, recordó.

Explicó que la Terminal está concesionada desde hace 27 años. “Lo que hicimos fue tomar el contrato y verificar las cosas que faltaban cumplir para poder llevar adelante las tareas de refacción y adecuación. Algo que estaba pendiente desde el año 1993”, resaltó.

“Las gestiones anteriores no lo hicieron, lo dejaron pasar. Con Capitanich y Diego Arévalo (secretario de Obras Públicas de la comuna) nos pusimos a estudiar cómo poder avanzar sobre las tareas pendientes. Nos dimos cuenta que, desde el lugar de la arquitectónica, era un programa viejo. Requerían espacios y cuestiones que ya no se cumplen”, detalló.

Una de las cuestiones es el área de paquetería y empaque. “Había un gran flujo dentro de la Terminal, donde están los locales. Fijamos pautas sobre cómo optimizar la terminal, trabajamos con un estudio que contrató la concesionaria y modificamos la ordenanza para poder cambiar esas pautas y requerimiento. Comenzamos actualizando el uso de plataforma y renovando el esquema de arquitectura para mejorar la funcionamiento”, ejemplificó.

La nueva Terminal, ahora más nueva que nunca, reinaugurará el próximo domingo. ¡Libertad Digital te la muestra antes que nadie!