Libertad Digital
En el marco de la emergencia sanitaria por COVID-19, el Ministerio de Salud Pública del Chaco, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Ministerio de Salud de la Nación, recomienda el uso de barbijo N° 95 para los agentes hospitalarios de áreas críticas que realizan procedimientos con alto grado de aerosolización, y los barbijos quirúrgicos para los pacientes sintomáticos y el resto del personal del hospital.
Además, sugiere a la población general no utilizar barbijos N95 ni quirúrgicos porque quitan recursos valiosos y escasos al personal de salud. “En el caso de requerirlo, la población en general debe utilizar máscaras faciales caseras cuando están en espacios cerrados o sin posibilidades de distanciamiento social”, expresó la ministra de Salud, Paola Benítez.
Teniendo en cuenta esto se desaconseja el uso masivo de un elemento de protección considerado como un insumo crítico en el contexto actual de pandemia por COVID-19. Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, pidió no agolparse a comprar barbijos quirúrgicos al señalar que “es un insumo médico crítico a nivel mundial y tiene que tener un uso apropiado”. En su reporte diario de la situación epidemiológica del país dijo que “es muy importante reservarlo para el equipo de salud”. Estas mismas recomendaciones las compartió en la última videoconferencia del Gabinete del Ministerio de Salud de la Nación con representantes de las carteras sanitarias del país, incluida la ministra chaqueña Paola Benítez.
El barbijo quirúrgico tiene, según la OMS y las sociedades científicas nacionales y mundiales, dos indicaciones precisas: para los pacientes sintomáticos y para el personal de salud que los asiste (exceptuando áreas críticas, donde se debe usar el N95). Por esta razón no está indicado su uso generalizado en la vía pública. “El barbijo quirúrgico es imprescindible para los pacientes sintomáticos con fiebre, tos o dolor de garganta”, subrayó la Ministra de Salud del Chaco. El personal sanitario que asiste a pacientes con COVID-19 además de barbijos debe llevar antiparras o protectores visuales, camisolines hidrófugos, guantes, entre otros elementos de bioseguridad recomendados por el protocolo de actuación para coronavirus.
Con respecto a los barbijos caseros, Carla Vizzotti explicó que de ninguna manera “reemplazan” a las medidas de protección como el lavado de manos, limpieza de superficies, la ventilación de ambientes y, sobre todo, no elimina la necesidad del distanciamiento social (de un metro y medio o dos metros entre personas). Además recalcó a la población la importancia de seguir cumpliendo en sus hogares con el aislamiento social preventivo y obligatorio para evitar la propagación del COVID-19.
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