Equilibrio en el día a día: un balance entre establecer prioridades y saber organizarse

"El equilibrio no se trata de algo estático, sino de un balance constante. Es dinámico, en una vida que no es estática, algo estricto tiende al quiebre, al caos", comenzó diciendo.

"Hay tres puntos importantes que se pueden adaptar a la vida de cada uno", dijo y continuó: "Tendemos a correr demasiado porque estamos en una sociedad que te lleva a eso si uno no aprende a poner límites, por eso hablamos de tres cuestiones relevantes para aquellas personas que corren todo el tiempo, la primera de ellas es aprender a priorizar".

Y siguió: "Si no sé qué es lo que necesito, qué es lo quiero o a dónde voy, mi día a día será correr por lo urgente y no por lo importante. Hay que preguntarse cuáles son las prioridades que tenemos y armar una lista de ellas y luego saber si lo estamos haciendo o no".

"El segundo tip tiene que ver con la organización. Hay que diagramar semana a semana los horarios fijos, los espacios libres y qué voy a hacer en ellos. Allí tengo que aplicar las prioridades", detalló.

"Y por último hay que poner todo esto en práctica ¿Y cómo hacerlo? Con equilibrio, sabiendo que no es algo estático, rígido. Si algo de lo que planifiqué no sale de esa manera, hay que aprender a adaptarse y pensar qué cosas hay que hacer si o si y cuáles pueden hacerse otro día", explicó.

"Cuando buscamos adaptarnos, mantenemos el equilibrio", afirmó.

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