"El 2024 fue una cirugía gruesa": un análisis del ajuste económico de Milei y qué esperar del futuro del país

El contador público Cristian Ocampo, titular de la Consultora Ocampo & Asoc., brindó un análisis profundo sobre las políticas económicas implementadas por el gobierno de Javier Milei y los desafíos que estas plantean para el futuro inmediato. Con una visión crítica y reflexiva, destacó los impactos del modelo de ajuste fiscal sobre la vida cotidiana de los argentinos y delineó posibles caminos hacia la recuperación.

Para Ocampo, las decisiones del gobierno actual responden a una visión que propone el achicamiento del Estado y su mínima interferencia en las dinámicas del mercado. “Estamos frente a un modelo que entiende que el Estado debe retirarse de ciertas áreas. Esto tuvo consecuencias directas en nuestra calidad de vida, especialmente con el ajuste en subsidios energéticos y de transporte”, sostuvo.

El impacto de estas políticas no tardó en sentirse. Según el especialista, la eliminación de subsidios y la desregulación de precios llevaron a un aumento significativo en combustibles, servicios energéticos, telefonía y cable. "Las empresas no trabajan para perder, y ante la retirada del Estado, ajustaron sus precios de manera directa. Esto encareció el costo de vida de todos los argentinos", explicó.

Obra pública y desempleo

Otro aspecto crítico del ajuste, señaló Ocampo, fue la desaceleración de la obra pública. "En provincias como la nuestra, que dependen de los fondos nacionales, este recorte golpeó especialmente fuerte. Las transferencias discrecionales desde Nación prácticamente se paralizaron, y esto afectó a empresas constructoras que, al quedarse sin proyectos, despidieron a gran parte de su personal”, detalló.

La situación es particularmente grave en el sector de la construcción, donde los regímenes laborales permiten despidos más ágiles. “Esto ya se está sintiendo, pero el impacto será aún mayor en los próximos meses. Sin inversión en infraestructura, los pueblos se atrasan, y eso es responsabilidad del Estado", afirmó.

Ocampo también destacó el ajuste en el sistema jubilatorio, un sector que perdió alrededor del 20% de poder adquisitivo real. “Los jubilados son uno de los grupos más vulnerables, y esta política de ajuste los dejó en una posición crítica”, remarcó.

El especialista reconoció que el ajuste logró reducir significativamente la inflación. Sin embargo, advirtió sobre el alto costo social de este logro. "El equilibrio fiscal que se muestra en las planillas y que el gobierno puede exhibir al Fondo Monetario Internacional o a inversores extranjeros no refleja el sufrimiento de la sociedad. La recesión económica y la pérdida de empleos no son sostenibles a largo plazo", señaló.

De cara al futuro, Ocampo expresó su esperanza de que el gobierno encare una segunda etapa del modelo económico, orientada a la reactivación y el desarrollo. "Este año fue una cirugía gruesa; ahora es necesario un plan de desarrollo económico que reactive la obra pública y fomente el consumo. Si no, el país se estancará", advirtió.

Para Ocampo, el Estado debe recuperar un rol activo en áreas clave como la salud, la educación y la infraestructura. “Argentina supo ser lo que es gracias a estos servicios públicos que formaron a generaciones. No hablo de un Estado que regale cosas, sino de un Estado eficiente, que invierta donde el sector privado no puede o no quiere”, enfatizó.

Un punto clave que planteó el contador fue la compleja situación fiscal que enfrentarán provincias y municipios en 2025. “La recesión inducida y la baja en el consumo afectan directamente la recaudación fiscal, que depende en gran medida de la actividad económica. Sin consumo privado ni inversión pública, la situación financiera de muchas provincias será crítica", explicó.

En su análisis, Ocampo destacó que la sociedad argentina tiene una tradición de aspirar a un "Estado de bienestar" que, aunque criticado, logró consolidar pilares como la educación pública y la salud universal. “El modelo de 2024 fue lo opuesto: un Estado ausente. Si bien el manejo estatal en el pasado tuvo ineficiencias, descartar por completo la intervención estatal no es una solución viable”, concluyó.

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