Con perspectiva: cómo nos relacionamos con los animales

"Esta columna está relacionada con la manifestación antiespecista que se produjo en la Sociedad Rural de Buenos Aires, donde resaltó la falta de tolerancia al que piensa distinto, la falta de acercamiento hacia ideas que vienen a cuestionar construcciones, que son muy irrespetuosas y vienen a instalar algo que siempre existió: nuestra convivencia con los animales", inició.

"Hay diversas empresas que han hecho películas animadas, donde no sólo buscaban entretenernos, sino ir calando en nuestras ideas instaladas sobre la relación que tenemos con los animales de compañía y de consumo. Una de ellas es Las locuras del Emperador", dijo.

"Kuzco es una persona muy soberbia que se termina convirtiendo en llama y tiene que convivir con un hombre indígena, que pedía por un pedazo de tierra. Vemos como alguien muy superficial y abusivo desde su situación de poder, se convierte en un animal que depende de una persona buena", comentó.

"Otra película relacionada con esta temática es Tierra de Osos. La historia es sobre un niño que quiere vengar la muerte de un familiar, que fue asesinado por un oso. Los dioses ancestrales terminan convirtiéndolo en dicho animal y sólo así puede ver el mundo desde esa perspectiva", resaltó.

"También quisiera centrarme en el film llamado Pollitos en fuga, donde los pollos de una granja temen convertirse en comida. Por otra parte, en la película Dos pavos en apuros, se muestra que los pavos quieren dejar de ser comidos y plantean una salida cultural sobre la tradicional comida del Día de Acción de Gracias en EE.UU", remarcó.

Como recomendación, Araujo nombró dos libros: "Malcomidos (2013) y Mala Leche (2018), ambos de Soledad Barruti, sirven para pensar y cuestionar sobre esta temática", mencionó.